TÚ ERES UN SER SUPERIOR DIVINO (MUÑECA GÉIGEL) MUÑECA GÉIGEL

Hola:  Un día hermoso como hoy les publicaré un capitulo más de este hermoso libro, el cuál me ayudó mucho en momentos en que creía que no habría salida, pero la hay está dentro de nosotros. Tomando conciencia vamos comprendiendo que todo es posible, somos seres realmente increibles podemos crear lo que deseemos, si lo pedimos con el corazón.Ahí está la verdad de nuestra existencia, las respuestas a nuestras tantas dudas. dentro de nosotros, solo debemos buscar dentro y no fuera lo que queremos para nuestra vida.
                               
                                           HAY UN MUNDO NUEVO PARA TI



Para ti hay un mundo nuevo por descubrir que te será revelado en la medida en que logres la Comunión con tu Dios.Yo sé que existe ese mundo porque lo siento en cada célula de mi Ser y lo veo claro en mi mente divina. Yo sé que en la medida en que un número suficiente de personas descubran este mundo, ocurrirá un cambio total en el  planeta y se acabará, se disolverá en el Amor, el mundo convulso, desordenado, desamoroso y violento que tenemos en este momento. Este mundo nuevo es espiritual, es el reino de los Cielos del cual nos habló Jesús; pero lo interesante es que una vez que reconocemos sus tesoros eternos de Paz, Amor, Dicha y Abundancia espontáneamente sin lucha ni esfuerzo, veremos la demostración física del Mundo de Dios: primero en nuestro mundo individual ;luego a medida que haya más demostraciones individuales en el mundo material, veremos el mundo físico colectivo sanarse.

El mundo de Dios, primero, se manifiesta espiritualmente en una continua Paz interior, que a nada ni a nadie afecta porque nace de la seguridad perfecta que Dios está a cargo de nuestras vidas y, siendo un
Padre-Madre Amor, lo que quiere para cada uno de sus Hijos es la felicidad total aquí y ahora. Además, por medio de la comunión con Dios, conocemos a Dios y nos conocemos a nosotros mismos como Su Bendita Semejanza, reconociéndola también en cada uno de nuestros hermanos. ÉSTA es la verdadera experiencia del perdón que nos lleva a vivir el Amor incondicional.

El mundo espiritual de Dios, que es el único, es tan real como el que vemos, olemos, escuchamos y gustamos;de hecho, es el mismo mundo interno que se manifiesta en lo externo en el mundo físico de las formas. El  mundo violento y convulso que tenemos es también espiritual, mal creado por nuestra parte humana. Es por eso que podemos ver cúanta humanidad hay en nosotros de acuerdo al desorden en nuestro mundo externo.

El mundo de Dios, Su Reino, ya ha sido establecido en la Tierra desde el momento de la Creación y lo empezamos a sentir y a ver internamente en la medida en que logramos la Comunión con Dios.

Descubrir el Mundo .de Dios de ninguna manera nos saca del mundo  físico; todo lo contrario, nos mete más dentro de él porque comenzamos a amarlo realmente como una extensión nuestra y a verlo de forma totalmente diferente.

Vemos la fabricación de nuestra mente humana pero sabemos, en lo profundo de nuestro Ser, que ése no es el Mundo de Dios y, por lo tanto, no es lo que Dios quiere para nosotros.Aceptamos ese mundo asumiendo el 100 por 100 de responsabilidad por él, pero sabemos que en la medida en que nos vayamos convenciendo más y más de que somos los Hijos perfectos de Dios y nos merecemos lo mejor de la vida, el mundo fabricado por nuestra mente humana se irá disolviendo en la medida en que va surgiendo milagrosamente ante nosotros el Mundo de un Dios Padre-Madre amoroso, nos merecemos lo mejor de la vida.

Al lograr la Comunión con Dios y encontrar el Reino de los Cielos y nuestra inconmensurable riqueza  interna, estaremos viviendo dentro del mundo humano, pero sabemos a niveles internos profundos que ése no es el Mundo que Dios tiene para cada uno de Sus Hijos y que no pertenecemos a ese mundo.Disfrutaremos placenteramente de todas las cosas que constituyen un estilo de vida de primera clase, pero no tendremos apego a ninguna cosa, persona o evento en el mundo material. Seremos libres porque lograremos la independencia emocional, mental y económica en la total certeza de que nunca nos faltará nada. Esto no quiere decir que nos convertiremos en ascetas, ni fanáticos, ni personas extrañas; todo lo contrario, se nos identificará por nuestras vidas sencillas y a la vez totamente enriquecidas espiritual y materialmente;lo que no tendremos es el apego desordenado a lo material, porque sabemos que todo lo tenemos siempre a nuestra disposición dentro del Plan Divino y que lo que nos pertenece por derecho de conciencia nada nii nadie nos lo puede quitar ni aguantar. Si algo se ha ido de nuestras vidas como parte de una lección, sabemos que, de acuerdo a la ley de Restauración, todo nos será restaurado, como le sucedió a Job en su vida.La riqueza material será ineludiblemente parte de nuestra experiencia de vida. No habrá en nosotros ninguna preocupación por la pérdida de algo o de alguien, porque estaremos llenos de la Presencia de Dios, que es lo único que nos da el sentimiento profundo de estar totalmente satisfechos siempre.

El mundo de Dios es real.Es un mundo perfecto y ordenado, un mundo de personas, animales, naturaleza y cosas manifestadas por personas que han reconocido que son los Hijos  de un Dios Padre-Madre Amor que los quiere ricos espiritual y materialmente; por tanto, se merecen lo mejor de la vida.Parte del mundo de Dios ya se vislumbra en todas las personas maravillosas que tenemos en nuestra experiencia de vida, en toda la belleza de la naturaleza y los adelantes tecnológicos; en fin,en todo lo que está bién en el mundo.
Por tanto, lo que el mundo necesita en este momento es verdaderos buscadores de la verdad, dispuestos a hacer lo que sea necesario para vivir la experiencia de Dios, comprometiéndose a perdonar para poder vivir amando sin condiciones.

 El Amor sin condiciones únicamente se da cuando reconocemos nuestro Cristo,el Ser Superiorque somos.Reconocemos también el Cristo en toda persona sin distinción, no dejándonos engañar por las apariencias. Esto sólo se logra cuando logramos la comunión con Dios, lo cual nos lleva a conocer directamente a Dios nuestro Padre-Madre. Ésta es la experiencia de Dios y de su Amor.Aquí ya no es condicionado el Amor porque todo lo que vemos desde nuestro Cristo es digno de Amor. Es imposible amar la parte humana, pecadora y débil en error.Sí es posible ver más allá de las apariencias, sin creer en ellas, la parte divina que es totalmente digna de ser amada.
También es posible sentir compasión, que es parte del perdón. La compasión es el reconocimiento del  Ser Divino en nuestro prójimo,entendiendo que nuestro prójimo es toda la creación.Sentimos compasión porque vemos lo real en los demás y nos compadecemos por el sufrimiento innecesario que les está produciendo su parte humana.
La pena es muy diferente a la compasión.Cuando sentimos pena por otros sufrimos con ellos porque pensamos que no podrán superar su situación. La pena es de nuestra parte humana que se está dejando engañar por las apariencias que vemos en nuestro mundo, sean de relaciones, de salud, de escased de dinero o de tiempo.

La búsqueda de la Verdad, nuestro deseo de una mejor vida, de superarnos y lograr el éxito y la prosperidad, no es de nuestra parte humana, es de nuestra parte divina que nos reclama la conexión con Dios y la vida buena que nos merecemos.

A través de todos los tiempos ha habido buscadores de la verdad y grandes maestros cuyo mensaje universal ha sido siempre el mismo: "Conócete a ti mismo."El mensaje universal de Dios a través de EL ARTE DE SER FELÍZ te dice lo mismo.
Tu parte humana jamás buscará a Dios ni la Verdad.Lo que quiere es mantenerse en la oscuridad y enredarte cada vez más en las apariencias.

La vida espiritual es una aventura fascinante que te lleva a reconocer que no sabes nada que hay un mundo por descubrir, que siempre está en el eterno presente en el cual se construye el futuro felíz. Nada hay en el pasado.Es necesario soltarlo totalmente.Nuestra parte humana humana trata continuamente de llevarnos al pasado para atormentarnos despertando nuestros resentimientos.Si algo necesitamos recordar del pasad, éste se nos revelará en sueños o en experiencias del presente que nos levantarán los mismos sentimientos y emociones de miedo, tristeza o ira, con el único propósito de que los miremos , dejándonos sentirlos pero reconociendo que no son de Dios;por tanto, no nos pertenecen

El mundo de Dios no tiene barreras ni limitaciones. La Sabiduría es infinita y , por tanto, tenemos toda una eternidad de maravillosas aventuras y descubrimientos por delante.Como dijo el gran sabio: "Sólo sé que no sé nada."

Todo buscador de la verdad debe de vivir alerta a la revolución de Dios y su Verdad. No puede sentirse satisfecho con la verdad que recibe de afuera, de sus maestros, libros, etc. Su verdadera riqueza le será revelada de adentro, de los Registros Akásicos en los cuales está la Revelación de la Inteligencia Infinita de Dios. No puede conformarse con la palabra escrita o hablada de afuera, siendo las palabras símbolos de la profunda riqueza espiritual interna a la cual tenemos acceso todos los Hijos de Dios.
Los que se alimentan de afuera están espiritualmente malnutridos. La sustancia divina que sostiene y satisface Solo se encuentra en la Comunión consciente con Dios.

Las verdades que vemos y escuchamos son semillas de la verdad que plantamos en nuestra mente: Si caen en tierra fértil, dan frutos de Vida; si caen en tierra estéril, no pueden abrirse, germinar y madurar.
Las semillas de la Verdad deben ser plantadas en nuestra mente y nutrirdas y regadas por medio del silencio y otras herramientas que ofrece EL ARTE DE SER FELÍZ: eLMapa de Prosperidad, El toque de Amor y las Afirmaciones de Divinidad y de Prosperidad.

La literatura de autoayuda, los seminarios, talleres, cintas y los principios de EL ARTE DE SER FELÍZ son como un puente que nos lleva a conectarnos con nuestro Ser Superior Divino que vive en Presencia de Dios.Aquí seremos realmente nutridos desde adentro por la Verdad que nos libera.Esto es posible para todo el mundo pero sólo un grupo de personas inquietas, buscadores reales, se comprometerán con la autodisciplina que requiere la vida espiritual.

Buscar, encontrar y vivir la Divina Presencia, conseguir la Comunión con Dios para poder vivir su Paz, es la más alta meta que podemos tener y yo diría que la única. Todo lo demás se nos dará espontáneamente por añadidura. En la medida en que vamos logrando esta comunión interna nos damos cuenta que, cada vez que se repite, es una experiencia más clara, más profunda, más enriquecedora y que los frutos son cada vez mayores y sabemos que esto nunca terminará. Al embarcarnos en esta maravillosa aventura de verdadero vivir, adquirimos un genuino apasionamiento por la vida y terminamos para siempre con el sentimiento de soledad y aburrimiento.
De esta manera progresará cada individuo, y, por ende, la humanidad se irá disolviendo en la divinidad. Se enriquecerán las artes, la literatura y la ciencia, surgiendo nuevos descubrimientos e inventos para beneficio de todos los Hijos de Dios.

¿Qué es lo que realmente buscamos? ¿Mejores relaciones? ¿Mejor salud? ¿Salir de problemas de dinero? Está bién desear una vida mejor, una vida de primera clase,. Todo esto vendrá por añadidura y especialmente cuando alcancemos la Paz de Dios, por lo cuál ésta deberá ser nuestra primera meta.

Hoy comienzas una nueva vida para ti, fresca, tranquila y cristalina, llena del Amor, la Paz., la Dicha y la Abundancia de Tu Dios.

El proceso de crecimiento espiritual requiere que muramos a nuestra parte humana para que renazcamos en nuestra parte divina. Nos enfrentamos con alegría a cada lección reconociendo que cada una de ellas es una oportunidad de superar nuestra humanidad en el reconocimiento de nuestra divinidad.
Cuando Jesús le dijo a sus discípulos que para llegar al Reino era necesario venderlo todo, era una manera de hablar sobre el desapego a lo material.

Dios está esperando ser reconocido por cada uno de sus Hijos porque Dios está en todos y en todo, pero no puede actuar a través de sus Hijos a menos que su Presencia sea reconocida.
Dios está presente en cada uno de sus hijos llamando a la puerta. Su llamada es ahora más intensa que nunca, como lo demuestra el despertador espiritual que está teniendo el planeta.

Deseo , les haya gustado, a mi me ha servido de mucho.
Les deseo a todas las madres un día hermoso y especial hoy ahora y siempre.
                           
                                Shaloom